Enrique
Aquino
El primero de septiembre, el presidente Felipe Calderón presentó dos iniciativas preferentes, una fue en materia de rendición de cuentas por
parte de estados y municipios. Hay endeudamientos que han puesto en crisis a
varios estados de la república —un ejemplo, Michoacán—. No es una solución de
fondo que las deudas de los estados las absorba el Gobierno Federal, por eso es
necesario transparentar la contratación de deuda y los gastos de gobiernos
estatales para que tengan unas finanzas más sanas.
La otra iniciativa es la reforma laboral; es el tema del
momento y lo que ha causado una gran expectación y polémica en todos los ámbitos.
Por ejemplo, el PRD dice que buscará invalidar la reforma
laboral vía tribunales (CSJN), por considerar que es inconstitucional el
procedimiento de “iniciativa preferente”, porque este recurso carece de
reglamento. A lo que el coordinador de la bancada priista Manlio Fabio
Beltrones contestó:
“Lo que está en la
constitución, no puede ser inconstitucional. Y la constitución prevé este nuevo
instrumento que es la iniciativa preferente.”
Recordemos que el
presidente de la República ya puede presentar “iniciativas preferentes” después
de las modificaciones publicadas el
nueve de agosto, de esta forma, junto con el
poder Legislativo pueden atenderse las prioridades de agenda nacional. Los
del PRD lo saben, lo único que buscan es
trabar la iniciativa para no llegar a un acuerdo.
Ariana Montiel diputada local del PRD, anunció que mañana legisladores
de su partido realizarán un volanteo en el Zócalo para que la ciudadanía se
entere de “los riesgos dela reforma”. Además también el miércoles habrá una
marcha del Zócalo a la Cámara de Diputados.
Ayer en el periódico milenio, en la columna Trascendió, menciona que la corriente
bejaranista —tribu— del PRD, pretende tomar la tribuna de San Lázaro para
evitar la reforma laboral. ¿Esta es la izquierda moderna de la que tanto
pregonan?
Por su parte el ex
candidato presidencial por las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, acusó
al Enrique Peña Nieto y a Felipe Calderón de complicidad en la reforma laboral, a lo que el responsable del
tema laboral del equipo de transición de Peña Nieto, Alfonso Navarrete, dijo:
“Esa es una falsedad
más del señor López Obrador cuyo costo ha sido muy alto ya hasta en la urnas,
en contra de su propio movimiento, lo cierto es que hay la convicción del
presidente electo, Enrique Peña de que México cuente con un nuevo marco
jurídico laboral que permita el crecimiento económico, que permita la creación
de empleos y desde luego que esté equilibrado con los factores de la producción
con pleno respeto a los derechos colectivos.”
Agregaríamos que en cualquier país donde haya respeto entre
las oposiciones, a veces se vota a favor y a veces en contra de las iniciativas
que presentan sus opositores políticos, en otras ocasiones se tienen que
modificar para ser aprobadas, esa es la madures política. Pero solo las
personas que padecen oligofrenia, creen que para ser honestos se tiene que
estar en contra del gobierno y sus iniciativas. Esa postura llevaría a
cualquier país a un desastre.
Por otro lado, después de la
gran aportación que el #YoSoy132 hizo a México al boicotear la boda del
hijo de Salinas el pasado fin de semana, ya acordaron que mañana martes harán
un plantón en la Cámara de Diputados para rechazar la reforma laboral. Y por el
mismo motivo, el jueves marcharán del Monumento a la Revolución hacia San Lázaro.
El PRI, por su parte, descarta cualquier cambio al artículo
123 constitucional y aspectos como el derecho de huelga o la autonomía sindical por razones de legalidad. Beltrones a través
de su cuenta de Twitter nos compartió las reservas del grupo parlamentario del
PRI para la reforma laboral: http://recorta.com/578371
Algo que en lo que todos coincidimos es que es necesaria una
reforma laboral para el país. Tal vez la iniciativa de Calderón llegó tarde,
pero esta iniciativa promete muchos cambios positivos para el bien del país y sus trabajadores, ojalá y con sus
modificaciones cuaje muy pronto. Aunque el mismo PAN dice que no aceptará una
reforma laboral mediocre.
Así están las cosas, pero el trasfondo son los sindicatos
aliados a los partidos de izquierda que están inconformes. El que diga el PRD
que impulsará una “democracia sindical”, es un lirismo sin eficacia, contra el
que debemos precavernos con tanta energía como contra el gánster Martín Esparza
del SME, que fue apoyado por el PT y AMLO todos estos años.
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