sábado, 8 de septiembre de 2012

Busquemos espacios propicios para luchar por nuestros ideales

Enrique Aquino

Uno de los temas que más me preocupa después de las elecciones es que hay muchas personas que no toman los caminos correctos para luchar por sus ideales. ¿A qué me refiero?, que hay muchos caminos para persuadir y propiciar un cambio en la sociedad, por  ejemplo, el periodista tiene la oportunidad de cambiar algo todos los días, el político igual.

Estudios que hizo de Roy Campos registraban que  los ciudadanos registran muy baja participación en las organizaciones políticas (5 por ciento) y en las organizaciones de beneficencia (6 por ciento), en cambio en organizaciones religiosas (23 por ciento). También decía el presidente de Consulta Mitofsky que las protestas estudiantiles no modificaban las tendencias electorales.

Las marchas y las protestas han dejado de ser efectivas y se han vuelto para muchos ciudadanos un pesar por lo que éstas perjudican a los automovilistas y a comercios. Los trending topics en Twitter se han devaluado y algunos ya no tienen el mismo impacto. Hay muchas trincheras donde se puede hacer un frente con más efectividad, los jóvenes deben participar más en política y o en agrupaciones que tengan un relación directa con asuntos públicos.

Pero antes de cambiar algo, tenemos que saber cómo y qué queremos cambiar en la sociedad. Muchas veces apoyamos a candidatos de un partido sin conocer a fondo sus propuestas. Esto me recuerda una historia que me contaban de la revolución, muchos peleaban si conocer a fondo cual era el fin de esa lucha, solo lo hacían por andar en al “bola”. Los ideales nacen del conocimiento de algo.

La campaña de Enrique Peña Nieto tuvo como principal eje las propuestas basadas en una plataforma electoral  federal que hizo el PRI por medio de Fundación Colosio mucho tiempo antes de las elecciones. El “Programa para México” se llevo por toda la república, teniendo un dialogo con ciudadanos,  políticos de todos los partidos y  líderes de opinión. El programa de gobierno tuvo 5 ejes que fueron:

1.       Por una gobernabilidad democrática y un estado social de derecho.
2.       Por una economía competitiva y promotora del desarrollo.
3.       Por un compromiso con la calidad de vida y la equidad.
4.       Por una política ambiental sustentable.
5.       Por un una política exterior con rumbo.

Además las propuestas del Partido Verde también reforzaron esta plataforma electoral federal formando la Coalición Compromiso por México. Uno de los grandes ideólogos del PRI decía: “Primero el programa, luego el hombre”, primero se tenía el programa y luego se escogió  el candidato, no era querer tener el poder nada más por tenerlo, si no que ya se sabía por qué se quería gobernar. 

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